Fíjate. Mira a tu alrededor. ¿Cómo es tu vida?¿Haces, piensas y sientes lo que tu decides? Muchas personas definen la PNL cómo la tecnología del éxito, pero a mi me gusta más la definición de su creador, el Dr. Bandler: Es el camino hacía la libertad personal.

Personalmente, la libertad es uno de los valores más importantes. Quizás por eso estoy un poco harto de escuchar la radio, ver la televisión y tener que tragarme lo que algunos quieren que yo crea sobre la realidad.

En las escuelas nos imponen una visión de la ciencia, del arte, de la historia, de la espiritualidad o al menos de la ética. En casa nos dicen cómo tienen que ser la cosas, nuestros amigos tienen la razón y nuestros jefes saben lo que es mejor para nosotros.

¿Pero donde queda el individuo? ¿En qué momento nos programaron para estar contentos cuando gana nuestro equipo de fútbol y tristes si pierde? ¿En qué momento una bandera o una idea, justifica heroismos y sacrificios?¿Por qué nos hacen enfocarnos en las diferencias y no en las similitudes?¿Por qué unos son los malos y los otros los buenos? Fácil: Para dirigirnos.

No. No estoy hablando de conspiraciones. Estoy hablando de adiestramiento mental y emocional para poder dirigir a un conjunto de personas hacía A o B.

Veamos, hagamos la prueba: ¿Cuántos de los que discuten sobre política, economia o historia están lo suficientemente documentados? Vaya, dicho de otro modo, ¿Quién sabe de lo que habla? ¿Cuántos simplemente se creen a su líder político o religioso sin cuestionarlo? ¿Cuántos simplemente rechazan cualquier razonamiento simplemente porque no encaja con sus ideas y valores?¿Cuántos tienen tantas emociones de odio, rabia, desprecio, rencor,antipatia que no quieren ni escuchar a las otras partes?

No nos damos cuenta que no somos libres de pensamiento y mucho menos de emoción. Que estamos condicionados por lo que nos han enseñado y que nos han entrenado para sentir miedo. Sentir miedo de ser rechazados por la mayoría sino pensamos como ellos. A sentir miedo de perder lo que tenemos. A sentir miedo de lo desconocido y de los desconocidos.

Y para no tener ese miedo, estamos dispuestos a salir a la calle, a pelearnos o al contrario: a no hacer nada y quedarnos en casa quietos y calladitos.

Nadie nos enseña a hacernos preguntas tan básicas como: ¿Qué es importante para mí? ¿Que es lo que querría si no tuviera miedo? ¿Qué quiero dejar de legado? ¿Qué quiero conseguir? ¿Cómo sé que esto que pienso es cierto? ¿Cómo puede estar tan seguro de lo que piensa? ¿Cuáles son sus fuentes de información? ¿Cómo mis miedos no me permiten vivir cómo quiero? ¿Cómo sé que son reales? ¿Qué pasaría si no lo fueran?

Y muchas más que nos acercan hacía la libertad de sentirnos cómo queramos y no cómo otros quieran que nos sintamos según sus interesentes.

La PNL me ha ofrecido herramientas que me han permitido decidir como y cuando sentirme de un modo determinado y poder cuestionar mis propias ideas y las ideas de los demás, y de esto modo, escoger que quiero hacer en mi vida y cómo la quiero vivir desde el interior hacía el exterior y no al revés.

Estoy harto de que me bombardeen con una visión del mundo y que me digan lo que tengo que sentir. La libertad de decir empieza por decir que quiero pensar y sentir sin que me lo impongan. Por eso me gusta tanto la PNL.